Haus es un pastor alemán de dos años que jugaba en el jardín junto a Molly, una niña de siete años. Pese a que Haus apenas lleva dos meses con la familia, no dudó en proteger a su compañera de juegos al aparecer una serpiente de cascabel que amenazaba con picarle, el reptil se acercaba a la niña y el perro se interpuso arriesgando su vida y recibiendo tres mordeduras de la serpiente, lo que ha hecho que su vida corra peligro.
La madre de la pequeña, Donya, explica que vio al animal saltando hacia delante y hacia atrás y fue cuando se percató de la serpiente. La mujer se muestra aliviada, ya que no sabe si su hija "podría haber sobrevivido al mordisco".
El perro está en un centro veterinario donde se recupera de las mordeduras. El veneno se ha extendido por su sangre. Los veterinarios aseguran que sus órganos funcionan correctamente y se recuperará, pero es necesario recaudar dinero para pagar los gastos veterinarios de Haus. A través de una campaña de 'crowfounding' han conseguido recaudar 10.000 dólares.
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