Sanjana Madappa trabaja en protección animal en la ciudad India de Bangalore y tiene varios perros en casa. Una de las razones que con más frecuencia escucha cuando alguien decide deshacerse de su perro es que llega un bebé a la familia. Ahora ha sido ella la que ha pasado por un embarazo complicado, ha tenido que guardar cama varios meses porque corría el peligro de perder al niño. Durante este tiempo ha escuchado numerosas veces un consejo: ahora que llegaba un bebé a la familia no hay espacio para tanto perro.

"Mi familia, mis amigos e incluso mi médico me dijeron que me deshiciera de mis perros, que mi bebé era lo primero. Me dijeron las mismas cosas que los que abandonan a sus perros me habían dicho antes a mí", explica en una carta.

Sin embargo, su respuesta fue rotunda. "A toda esa gente les quiero decir esto: Nunca podría deshacerme de un animal que me quiere y que confía en mí con la misma inocencia y pureza que con la que lo hace mi bebé. No podría abandonar a un miembro de mi familia para dar la bienvenida a otro. Nunca traicionaría una vida que depende de mí tanto como la de mi hijo. A toda esa gente siempre le diré, NO SIN MIS PERROS.", relató.

"Mis perros son la razón por la que logré sobrevivir a mi embarazo sin volverme loca. Los días que me daba por llorar tenía el peso de la cabeza de Diegos sobre mi regazo, asegurándome que todo iría bien. Las noches que pasé en el suelo del cuarto de baño, Leo me acompañó, dándome dulcemente con su pata para asegurarse que estaba bien", explicó Sanjana, que durante el embarazo perdió a una de sus perras, Leela, aunque asegura que le hizo seguir sonriendo con sus tonterías hasta el final. "Cuando por fin lograba dormirme, tenía a Cujo a mis pies. No podía permitirme el lujo de quedarme en la cama compadeciéndome de mi misma cuando todos estos chicos dependían de mí", asegura, al tiempo que cuelga en las redes sociales un reportaje fotográfico con sus perros.